New York for beginners

¿Qué se puede hacer para superar el mono que te deja un crucero por el Adriático? pues poner rumbo a Nueva York 48 horas después, no te da tiempo de  nostalgias incómodas, ya las sufrirás todas juntas a la vuelta…
Mi hermana Alicia y su marido, Carlos, invitaban a mi hijo, Abel y a mi sobrino, Pablo (les tienen acostumbrados a este tipo de regalitos). Nos sumamos otros tres hermanos: Nuria, Victor y yo. Los principiantes éramos mi hermano pequeño, Victor, mi sobrino Pablo y yo. Los demás, repetían.
Llegamos, dejamos las maletas en nuestro hotel en Manhattan (26 con la 6ª) y paseito a Times Sqare. Empieza el asombro que no me abandonó en toda la estancia...

Primera cena en un dinner, atendidos por un mexicano (como casi siempre)

Dormimos de maravilla en el Holliday Inn Manhattan 6th ave (sus camas son antológicas) y comienza nuestro recorrido, agotador y apasionante, por La City:

The Iron Building

Puestos callejeros de todo por todas partes (hacer régimen en NY debe ser imposible)

Aquí Alicia y Carlos, plano en ristre, haciendo de Cicerone. Siempre frescos y sin una sóla muestra de cansancio (deben ser de otro planeta)

Tiendas espectaculares, por ejemplo, Dean & Deluca, en El Soho

Algunos edificios representativos de la arquitectura del hierro

De aquí salimos con varios Levi´s 501

Esta otra tienda estaba tapizada de máquinas Singer antiguas (Victor, con su Ipad,  sin perder detalle)

Comida en Chinatown, Zona Cero, Puente de Brooklyn, helado en la bahía y cena en Little Italy

Mirad la bici con funda de ganchillo que había aparcada bajo el puente

Metro, Harlen, misa gospel (no photos, please!), Central Park, Madison ave, la 5º…

Otra tienda-deli fantástica, Zabar´s, en la que comimos (yo elegí, entre millones de posibilidades, un bagel de salmón y queso crema, delicioso; un crumble de frambuesa y un gran zumo de frutas)

La casa de John Lennon y el monumento a su memoria en Central Park

Hotel Plaza. Puedo ver a Big, el día de la fiesta de su compromiso, y a Carrie Bradshaw, con su vestido de seda beige, en la puerta...

Llegamos a St. Patrick's Cathedral

Aquí reflejada en el edificio de al lado

llegando al Rockefeller Center 

La soberbia Biblioteca Nacional

 

Aquí mi hermana Nuria y mi cuñado Carlos comprobando que en los fondos de la biblioteca está uno de los libros publicados por él, y sí, lo tenían ("La frontera democrática del liberalismo: Segismundo Moret")  

Una exposición sobre los jardines de La Alhambra, haciendo patria...

Preciosas fachadas art decó

Polis de peli…

Los jovenzuelos de compras a un mall, y los demás ¡al Moma!

Y al salir del museo, antes de ir a comer unas alitas búfalo en el Atomic Wings, un coctel en un restaurante italiano para reponer fuerzas (servidos por un camarero mexicano, claro)

Y después, a la impresionante Estación Central

Al ferry, a ver La Estatua de La Libertad, , Apple store, para comprar un Ipad, galerías de arte del Soho, Magnolia Bakery para reponer fuerzas y goodbye con el corazón...

Aquí compraron mi hermana y mi cuñado una litografía de Picasso, "Le goût du bonheur", que les enviarán en Septiembre. Un capricho precioso

A Magnolia, que no sólo de arte vive el hombre...

La delicia que eligió Pablo

Abel dando buena cuenta de su cheesecake con nueces de Macadamia y chocolate blanco, ni os imagináis…

Tuvimos que ayudarle, pobrecito. Carlos siempre dispuesto a echar una mamo a la familia...

Volveremos